Cuidados para tus instrumentos

Transportar y almacenar tus instrumentos puede ser una tarea “fácil” pero también puede convertirse en un verdadero infierno.

Para asegurarle una larga vida y buen funcionamiento a tu instrumento existen cuidados que debes aplicar antes, durante y después de tocar, así como también durante el tiempo que no lo utilices.

Almacenaje

Guardar y no utilizar tu instrumento por algún tiempo requiere un pequeño “ritual” para evitar que le pase algo.

Lo primero será limpiarlo, quitarle el polvo, en caso que sea de cuerdas limpiarlas también. Después busca un lugar donde el sol no pegue de forma directa, no debe haber humedad y de preferencia que exista el menor tráfico posible.

Para guitarras, bajos, violines y similares es necesario bajar al menos medio tono la afinación para evitar que las cuerdas se rompan o el instrumento tenga problemas por la tensión.

De preferencia utiliza estuches duros, y cubre con plástico de burbujas o una franela el instrumento, nunca coloques nada dentro y ten cuidado al cerrarla tapa.

En el caso de la batería, lo mejor sería meter los tambores pequeños dentro de los otros y estos al bombo para ahorrar espacio, destensa los parches un poco y sobretodo nunca le coloques nada encima a los parches.

De preferencia coloca algo como aislante dentro, alguna manta o el plástico de bolitas de aire.

Transporte

Al igual que el almacenaje, procura evitar golpes y el sol, afina tu instrumento antes de utilizarlo después del viaje y déjalo que se ambiente.

Procura proteger tu instrumento si viaja en compartimentos como en un avión; será necesario aislante (plástico y tela o franela) o en una cajuela o compartimentos de autobús. De igual forma, baja la afinación, protégelo en estuche duro y de preferencia por seguridad cierra con llave el estuche (deja una llave en casa o con algún familiar de confianza).

Cuidados Generales

Lava tus manos antes de tocar ya que la grasa natural puede afectar la madera, cuerdas o metal de tu instrumento.

Retira el polvo para evitar ralladuras.

Afina tu instrumento poco a poco  y pruébalo hasta que se mantenga en la afinación deseada.

Si tu instrumento es de aliento, limpia las boquillas antes de salir.

Evita cambios bruscos de temperatura.

Si cambias cuerdas, hazlo una por una para evitar problemas de tensión

Aprieta, sin forzar las partes de tu guitarra, bajo o batería  u otro instrumento que estén sueltas.

Evita golpes.

Afina siempre en el mismo tono, así evitaras problemas de tensión.

Consigue bolsitas de silica de gel (como las que traen los frascos de las medicinas y los aparatos o maletas) para evita humedad.